miércoles, abril 26, 2023

Tardes de música electroacústica para escuchar y “ver”

 El Mercurio


De la audición a ciegas que representa la acusmática hasta las obras con solistas en el escenario, la electroacústica consolida una nueva variante de apreciación al incluir la imagen en pantallas. Hoy comienzan las tres jornadas del festival de la U. Católica.

IÑIGO DÍAZ

“Yo no planteo el relato visual en esta composición al punto de que la música se convierta nada más que la banda sonora de una película. Aquí tanto el sonido como la imagen están a un mismo nivel, se relacionan y reaccionan”, dice el compositor Andrés Ferrari, uno de los nombres que estarán en el Festival de Música Electroacústica UC, con conciertos entre hoy y el viernes.


Su obra se titula “Optikalis-04” y es un ejemplo nítido de lo que se denomina “música visual”, o música audiovisual, pues además del sonido en paralelo se despliega una imagen en pantalla. Es una tendencia en la composición actual que llega desde Europa, por ejemplo desde el festival EviMus en Alemania. “La música visual comparte los mismos espacios con la acusmática (música generada a partir de dispositivos electrónicos) y la electroacústica mixta (música que incluye a intérpretes en escena)”, refiere Antonio Carvallo, coordinador de la cita.


A lo largo de 20 minutos en “Optikalis-04” se observan formas, luces, volúmenes en movimiento, bloques, esferas y ovoides, además del silencio, representado en pantallas que se van a negro. “La obra muestra cosas que han ocurrido en el país y que me han ocurrido a mí. Se pueden apreciar las curvas de lo visual junto con las curvas de lo sonoro. Es un todo”, explica Ferrari.


En cada una de las tres jornadas se podrán escuchar y “ver” piezas electroacústicas, como “El trino de Ate”, para violín, electrónica y video, del también chileno Cristian Morales Ossio. Desde Europa llegan las obras visuales “Codex”, de la italiana Daria Baiocchi; Coalescence”, del portugués João Pedro Oliveira, y “Milk spilt on a stone”, de la española Helga Arias. También figura “In nature alone are forms”, de la argentina Ana María Rodríguez, donde se puede ver a la chelista Cosima Gerhardt accionando todo tipo de sonidos que no corresponden al instrumento a través de movimientos de tai chi.


“Diría que el elemento visual de la electroacústica en las obras del festival están en sintonía con lo que apuntaba el compositor y teórico francés Michel Chion, acerca de que la visualidad se enlaza con la música al punto de que ambas tienen el mismo valor, pero ninguna se entendería por sí sola”, dice Carvallo.


Los 21 conciertos del encuentro se realizarán en el Auditorio del Centro de Extensión Oriente (19:00 horas, Jaime Guzmán 3300, gratis), con cuatro estrenos absolutos y diez estrenos para Chile.


Desde luego, la acusmática pura y dura, vale decir la música cuya emisión “no nos permite identificar cuál es la fuente del mundo real de donde proviene el sonido”, en palabras de Carvallo, sigue siendo el alma de la electroacústica. Entre esas obras destacan “My own Kwai”, de Alejandro Albornoz, y “Hiss & crackle”, de José Miguel Candela, dedicada a ese compositor punta de lanza en la electroacústica chilena que es Gabriel Brncic. Programa e inscripciones en Musica.uc.cl.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario