Para octubre quedó anunciado el lanzamiento del disco, aún sin título, que cuatro años después sucederá a Hágalo usted mismo..Por Iñigo Díaz, Emol
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Miércoles 8 de Septiembre de 2010 08:56
SANTIAGO.- Iba a ser el anfitrión en la muestra del nuevo repertorio de Los Tres, pero una gripe fulminante de último minuto no sólo impidió a Álvaro Henríquez presentarse en la primera audición del próximo disco de su banda más importante en el sello Feria Music: también obligó a los Pettinellis a suspender la actuación que iban a dar este miércoles en el club Amanda de Vitacura.
Los Tres, sin embargo, mantienen su agenda tal y como la ha definido el equipo de manejadores. El grupo calibra los motores para la próxima Yein Fonda, que celebrará del 17 al 19 de septiembre en la Quinta Normal, con invitados como Quilapayún, Chico Trujillo, Buddy Richard, Los Tricolores y la dupla cuequera de Pepe Fuentes y María Esther Zamora.
De "Ch bah..." a "Shusha"
Esta semana, además, presentaron las canciones del disco intitulado que en octubre va a suceder a Hágalo usted mismo, publicado hace cuatro años. Fue grabado en los estudios Dreamland de Woodstock, mezclado en Brooklyn y contó con la producción de Joe Blaney, quien había trabajado con Los Tres en el disco Fome (1997).
En el lapso entre 2006 y 2010, la vida del compositor y cantante Álvaro Henríquez pasó por importantes cambios, según apunta el ejecutivo disquero Alfonso Carbone, lo que quedaría reflejado en la poesía de los quince temas que incluye el disco.
Uno de ellos es “Shusha”, primer single del álbum, que a partir del mediodía de este miércoles 8 de septiembre se podrá descargar desde la página oficial del sello Feria Music. Es el quinto corte del disco, “el más redondo de la historia de Los Tres”, en opinión de Carbone.
Los Tres tienen cuarenta y tantos
Las canciones mantienen la nota melódica característica del grupo, la alternancia del bajo eléctrico y el contrabajo de Roberto Lindl, los depurados arreglos de guitarras y la afinada voz de Álvaro Henríquez, cuyas letras parecieran ubicarse entre las imágenes oníricas y la historia real. Hay canciones de carácter rockero basadas en duros riffs como “Rosas al altar (ayayai)” y otras rockandrolleras y vibrantes como “Cárcel, hospital y cementerio”, con el relato de una pasión que lleva al narrador a “matar y robar” por una mujer.
La guitarra de Ángel Parra aparece protagónica en una balada casi surf como “Odio amarte así” y en otros versátiles arpegios para “Diabla” (“Diabla, no me mientas / dónde estuviste anoche”), y es el mismo Parra quien compone un bello instrumental de cuerdas latinoamericanas titulado “Marta” y dedicado a su madre. Otra pieza sin letra tiene ritmo de tres tiempos y se titula “Coliumo”, el nombre de una de las localidades arrasadas por el tsunami en la Octava Región.
Como en discos anteriores (“Mozéfala”, “Claus”, “Pancho” o “El rey del mariscal”), una galería de personajes vuelve a aparecer en los textos de Henríquez: “El hocicón”, “Diabla” y “Don José” permiten que las narraciones se abran hacia la tercera persona singular, mientras que dos cuecas conectadas en una misma historia renuevan los votos de Los Tres con las raíces de la música chilena. “En el banquillo” relata la historia de un condenado a muerte que va a ser fusilado en pocos instantes, y “En capilla” retrocede unos minutos y ubica al mismo condenado en sus últimos momentos, cuando se despide de su madre.
"Este disco no es sólo un plato único, no es una cazuela, un mariscal o una carne con papas. Es una comida completa con entrada, sopa, plato de fondo, ensalada y postre y un final muy dulce. Buen provecho", dice Álvaro Henríquez en su presentación oficial.
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