El Mercurio
El cantante, uno de los representantes más fuertes de la actual generación de músicos argentinos, regresa a Chile para presentar su último disco.
Por RAIMUNDO FLORES S.
"Ni siquiera al día de hoy, que hice un Luna Park, pasan temas míos en la radio. Y eso me llena de orgullo. Creo que es mejor que haya otro camino donde poder mostrar un tipo de música que sea más sincera y verdadera". Así reflexiona Lisandro Aristimuño al teléfono desde Buenos Aires. El cantante se refiere a la independencia y autogestión que han caracterizado su carrera y que, lejos de compañías multinacionales, ha logrado hacerse un nombre en la escena musical latinoamericana y un número habitual en la abultada agenda de conciertos chilena de los últimos años.
Este sábado, Aristimuño vuelve al Teatro Cariola luego de suspender una presentación que tenía agendada en noviembre pasado. El trabajo que lo trae de vuelta a Chile es "Constelaciones", su sexto disco de estudio que lo tuvo girando por México, Uruguay y Argentina, donde incluso hizo su debut en el emblemático Luna Park de Buenos Aires. "Fue algo muy fuerte para mí, sobre todo viniendo de la independencia y la autogestión; llegar a ese lugar fue algo muy valioso. El concierto se agotó, fue increíble", recuerda el cantante, quien volverá a presentarse en el histórico recinto porteño en agosto.
En el Teatro Cariola, el trasandino interpretará su última producción de manera íntegra, además de repasar parte de su repertorio que consideró que tenía una relación conceptual con las canciones de "Constelaciones". Este último trabajo muestra la continua evolución del sonido de Aristimuño, que todavía conserva su raíz folk, aunque reemplaza la faceta electrónica preponderante en "Mundo anfibio" (2012) por su lado más rockero.
Precisamente es el componente folclórico de la música de Aristimuño el que más guarda relación con Chile. El cantante, que creció en Viedma, ciudad ubicada en la Patagonia argentina, confiesa que en su casa su familia solía escuchar a artistas como Inti Illimani y Violeta Parra y que hoy admira a Fernando Milagros y Camila Moreno. De hecho, antes de su presentación del sábado, Aristimuño acompañará mañana a Moreno en el concierto de despedida que dará la cantante en el Teatro Caupolicán. "La música que está produciendo esta nueva camada de músicos chilenos me parece reinteresante; es muy novedosa y moderna", dice Aristimuño.
Respecto de su relación con los grandes referentes del rock argentino, afirma que siente más como una bendición que una carga el tomar la posta de ellos. "Mis maestros siempre van a ser Spinetta, Fito, Charly y Cerati. Me dejaron mucho y siempre tuve una recepción muy buena de esa gente. Agradezco tener la bendición de ellos", señala.
Después de su show en el Teatro Cariola, Aristimuño tendrá algunas presentaciones en Argentina y comenzará una gira por España, que lo llevará a ciudades como Sevilla, Madrid y Barcelona.
Por partida doble
El cantante también estará presente mañana en el concierto que dará Camila Moreno en el Teatro Caupolicán, que marcará el retiro indefinido de la intérprete nacional de los escenarios
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