El Mercurio
La cita parte hoy, en Bruselas.Es como un paraíso para los noveles instrumentistas: quince días de conciertos y clases con los mejores del mundo. Cuatro jóvenes chilenos fueron elegidos este año.
Romina de la Sotta Donoso
Tienen entre 14 y 21 años, y los cuatro fueron seleccionados para asistir a uno de los principales eventos musicales para jóvenes del mundo, el Festival "Musica Mundi", que se celebra en Bruselas desde hoy.
"El proceso de selección es muy riguroso y el nivel de exigencia allá, altísimo", comenta Roberto Bravo, asesor musical de "Calama Mi Sol", de Codelco-Chuquicamata, programa responsable de la orquesta homónima de Calama. A ella pertenecen los dos violinistas elegidos para el evento en Bélgica: la calameña Valeria Muñoz (14) y el iquiqueño Cristóbal Díaz (16).
"Ambos son dotadísimos, hemos tocado juntos varias veces", agrega Bravo. Muñoz, por ejemplo, es concertino de la Sinfónica Juvenil de Antofagasta, y debutó como solista con la Sinfónica de Chile a los 13 años.
También fue seleccionado el pianista rancagüino Alonso Llanos (18), alumno de Victoria Foust, y becario de la Corporación Amigos del Teatro Municipal. "Él nació para ser pianista, posee una gran musicalidad y personalidad", asegura Bravo, quien junto a Foust ofrecieron un concierto privado cuyos fondos reunidos dividieron en cuatro viáticos para los jóvenes.
El cuarto elegido para Bélgica es el valdiviano Nicolás Carrasco (21), primer clarinete de la Sinfónica Nacional Juvenil, quien ofreció en enero una deslumbrante actuación en el Teatro del Lago. Es el único que va por segunda vez.
"Los cursos duran quince días y se hacen en paralelo al festival. Cada curso consta de clases individuales con maestros que son los mejores del mundo", revela Carrasco.
Este año, entre estos maestros estarán figuras como el pianista Itamar Golan, el violinista Maxim Vengerov, el violista Gerard Causse y el Cuarteto Talich.
Pero Carrasco no sólo irá a aprender. Tan bueno fue su desempeño en la versión anterior, que este año le pidieron que diera un concierto. Y no sólo eso: también invitaron a su profesor, Jorge Levín, primer clarinete de la Filarmónica de Santiago, en calidad de instructor.
"Nada de esto sería posible sin la mecenas ítalo-chilena Isabella Gabrielli, quien quiere colaborar con el desarrollo de nuestros jóvenes músicos. Para eso creó una fundación que está financiando los pasajes y la estadía de los músicos", dice Maritza Parada, directora ejecutiva de la Fundación de Orquestas Juveniles e Infantiles.
"La posibilidad de ir a perfeccionarse a un evento de esta categoría es increíble, abrirle el mundo de la música a un niño tiene muchísimas consecuencias, todas positivas", sentencia Parada.
1 comentario:
Valeria Muñoz, es un talento que ya está formado hace años y por un profesor calameño, el otro alumno es de iquique y no de Calama. Calama cuenta con una gran orquesta desde hace una década y es la Orquesta de Niños del Altiplano, con talentos de Calama y pueblos del interior, que pena que la prensa no reconozca el esfuerzo de su Directora y de una Minera que ha apoyado contínuamente y no por cambios políticos...
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