El Mercurio
El guitarrista de Los Tres hace un alto para regresar a los repertorios jazzísticos de sus inicios. Esta noche estará en vivo en el Bistrot Jazz Club con un conjunto estelar.
IÑIGO DÍAZ
La primera serie de discos del Ángel Parra Trío, su banda más significativa, tuvo un fuerte acento swing y bop . El guitarrista lideró esos "Ángel Parra Trío" (1992), "Patana" (1995) y "Piscola Standards" (1996) desde su posición de jazzista instruido en Francia en los años 80 por Pierre Tullaz. "Volví a París hace poco y estuve otra vez con mi maestro. Fue increíble".
No es el único regreso de Ángel Parra. El músico, conocido más en la escena del rock y el pop por su pertenencia al grupo Los Tres, anunció un proyecto que lo reubicará en el plano del jazz puro. Se llama Ángel Parra y Los Fugitivos, y esta noche hará su estreno en un concierto de lujo en el Bistrot Jazz Club del Patio Bellavista.
"Venimos de probar una primera actuación en el club La Puerta Roja de Concepción, sin ensayos, a lo que venga. Hicimos más blues que nada, pero en Santiago vamos a tocar parte del repertorio que tengo visto. En ningún caso el Ángel Parra Trío se acabó. Está en un descanso porque hacía mucho tiempo que quería tocar jazz otra vez en lugares pequeños. Nunca he entrado al Bistrot Jazz Club".
El grupo tiene a figuras del circuito capitalino: Sebastián Jordán (trompeta), Agustín Moya (saxo tenor), Lautaro Quevedo (piano), Milton Russell (contrabajo) y Andy Baeza (batería), quien además integró las formaciones del Ángel Parra Trío para los discos "Un año más" (2007, con el guitarrista Panchito Cabrera), y "Espérame!!!" (2009, con Valentín Trujillo).
"Andy Baeza está mucho más metido en la escena. Me recomendó a casi todos los músicos para formar el sexteto. No sabía si me iban a dar bola, tal vez porque me ven como una estrella. Nada más equivocado que eso. Quiero volver a la raíz del jazz y no que crean que soy un rock star ".
Algunos de esos jazzistas tienen veinte años menos que el guitarrista: "Eso me motiva, me emociona y me pone en un escenario de exigencia musical potente", señala. Parra cuenta con una importante cantidad de arreglos sobre standards y composiciones de su primera época, como "Minoresqui" y "Dulce compañía" (1995), además de otras piezas jazzeras posteriores, como "Exótica mujer" (2003).
"Mi sonido y mi concepto en armonía ya están definidos. Cuando vas rumbo a los 50 años, uno tiene la dirección clara. Se puede ir mejorando en el escenario con la simbiosis de los músicos, pero está claro que la dirección del proyecto la he tomado yo". El programa está definido. "El repertorio tendrá citas a Thelonious Monk, Bud Powell y René Thomas, vamos a tener comunicación con el público, algo que creo que a los jazzistas les falta. Y por supuesto esto es un espectáculo musical y visual. Yo nunca permitiría que uno de mis músicos tocara con buzo y hawaianas", dice.
Un doctorado en Violeta Parra
A la misma hora en que se estrene en 20 salas la película "Violeta se fue a los cielos" (Andrés Wood), su nieto estará actuando en vivo. "Grabé todas las guitarras de palo, el cuatro, la mandolina y el guitarrón chileno para la banda sonora. Tocar 'El gavilán' es como hacer un doctorado en Violeta Parra. Es terriblemente difícil", dice el músico.
También trabajó allí Ángel Parra padre, quien durante tres meses hizo clases a la actriz Francisca Gavilán. "Ella aprendió a tocar, a cantar e incluso a gesticular como la Violeta. Su trabajo es realmente impresionante porque tú la escuchas y es la Violeta, pero al mismo tiempo no lo es. ¡Y más encima su apellido es Gavilán!".
Bistrot Jazz Club, Constitución 40, Patio Bellavista. 21:30 y 23:00 horas. $20.000, incluye tapas y tragos.
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