El Mercurio
El cantante habló con “El Mercurio” sobre “Los Montaner”, el docurreality que sigue a su familia en la intimidad y que acaba de estrenar sus primeros cinco episodios en Disney+.
Romina Raglianti
No son precisamente los nuevos Kardashian. La familia Montaner —liderada por el cantante argentino-venezolano Ricardo Montaner y su esposa, la escritora y cineasta Marlene Rodríguez— quiere que el docurreality que acaba de estrenar Disney+ y que los muestra en la intimidad sea menos sobre dramas creados y chismes y más sobre la música y la importancia de la familia.
“Nosotros llevamos 33 años de casados más cuatro de novios, son muchos años en los que hemos estado cimentando el crecimiento de nuestros hijos y el nuestro como pareja”, dice Montaner a través de una videollamada. “Yo que he sido un tipo que ha reivindicado el matrimonio como una base fundamental de nuestra sociedad y del crecimiento del ser humano, hoy con este programa lo reivindico más; no existe una posibilidad mejor para un ser humano que vivir en familia. Siento que la parte fundamental de este programa es precisamente eso, enarbolar la familia como la meta y el factor importante a seguir”.
“Los Montaner”, cuyos primeros cinco de 10 episodios ya están disponibles en la plataforma, sigue a la pareja y a sus hijos Ricky, Mau y Evaluna —todos cantantes— y a las respectivas parejas de estos, Stefi Rotman, Sara Escobar y el también cantante Camilo Echeverry, en actividades cotidianas como la celebración sorpresa del cumpleaños de Marlene; hitos familiares como el nacimiento de la hija de Evaluna y Camilo y el matrimonio de Ricky y Stefi; viajes por Latinoamérica y su preparación para sus respectivos eventos musicales y giras.
“Siento que nada está bajo un libreto en la vida. La vida es un constante aprendizaje y experimentar”, señala Montaner. “Lo que más me gusta de todo es que con lo diferentes que somos nos podemos dar el lujo de decir que nos amamos infinitamente y que la diferencia del uno con la del otro forman una especie de carácter original dentro de la misma familia, que nos permite transitar tanto las buenas como las no tan buenas de manera muy fluida y amorosa. Siento que mi experiencia principal en esto que acabamos de hacer es saber que tenemos algo que contar que puede parecerle a la gente interesante y puede de alguna manera tocar el corazón de los que nos están viendo”.
Ricardo Montaner cree que la revelación de la docuserie es su esposa, probablemente el rostro menos conocido para el público, ya que todos los hijos de la pareja tienen gran actividad en redes sociales, aparte de sus respectivas carreras musicales. “Ella era la que menos de acuerdo estaba con que este proyecto se hiciera, porque obviamente era un paso trascendental dejar a las cámaras entrar a la intimidad de la familia”, señala. “Pero luego, cuando empiezas a ver pedazos del programa editado, te das cuenta de que, sin lugar a dudas, ella maneja una forma de ser que se convierte en la columna en torno a la cual todos vamos dando vueltas”.
Sentada a su lado, Marlene Rodríguez asegura que el proceso de hacer su vida frente a un equipo de filmación fue orgánico. “Esto no es algo que me agarró desprevenida; abrimos las puertas después de mucho conversarlo y tener claridad de cómo queríamos hacerlo”, explica. “Ahí entró este equipo maravilloso que nos acompañó, súper prudente y respetuoso, e hizo que fuera muy fácil que ni nos diéramos cuenta de que estaban ahí. Al final, terminaron siendo parte de nosotros. Era peor lo que me imaginé que lo que terminó siendo, gracias a Dios”.
Dios es un aspecto importante en la forma de ver la vida de la pareja, que son devotos cristianos. Rodríguez lo menciona de nuevo cuando habla sobre cómo la serie construye la historia de su familia complementando lo grabado en la actualidad con material de archivo de propiedad de ellos. “Cuando veo esas imágenes me sorprende ver a mis hijos chiquititos y verlos ahora, con orgullo. De verdad que cuando uno se entrega a lo que uno cree que Dios está haciendo con uno, él se encarga. Cuando yo veo a mi familia digo guau, qué buen trabajo hizo Él”.
Gran parte de ese material del pasado fue filmado por Alejandro Montaner, hijo del primer matrimonio del cantante con Ana Vaz. “Si me preguntan en qué mes empezaron a grabar, sinceramente siento que empezamos a filmar cuando Mau, Ricky y Evaluna eran chicos. Yo siento que contar con ese documento histórico le da credibilidad a la familia que estamos mostrando, porque la estás viendo desde cuando apenas empezábamos a poner su fundación y luego la ves hoy, y te das cuenta de que hay una historia que contar, y es una verdadera”, finaliza Montaner.
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