Nicanor Parra recupera obras de su hermana Violeta

La Tercera

Hace unos días, Catalina Parra, la hija mayor del poeta, devolvió los óleos que ella misma había retirado de su casa de La Reina.

por Denisse Espinoza.

Un malentendido que por un instante fue calificado como crimen de arte. El sábado pasado, 14 óleos de Violeta Parra, pintados por la artista en los años 60, desaparecieron de la casa de su hermano Nicanor, en La Reina. Ese día, su nieto Cristóbal "Tololo" Ugarte, quien vive en la parcela, dio el aviso del supuesto robo, a través de su cuenta de Twitter. Sin embargo, horas después, se confirmó que las obras no habían salido del acervo familiar: fue la hija mayor del poeta, Catalina Parra, quien las había retirado de la casa, sin avisarle a nadie.

Hace un par de días, ella misma devolvió las obras. "Los cuadros están nuevamente en manos de su dueño, Nicanor Parra. Fueron movilizados de un lugar inseguro a otro seguro", dijo a La Tercera la artista visual, quien vive en Nueva York, pero está pasando sus vacaciones en Chile.

La noticia fue confirmada por otro de los hijos del antipoeta, Juan de Dios, conocido como "Barraco", quien hace poco era el principal custodio de las pinturas en La Reina.

"Fue una confusión. Yo no estaba en la casa y la Catalina pensó que las obras corrían peligro y se las llevó. Tiene razón. Trabajo todo el día y muchas veces no hay nadie acá, pero debería haber avisado. Ella se disculpó, dijo que no pudo ubicarme. Al final, yo mismo le llevé a mi papá algunas otras obras de Violeta que quedaban y ahora están todas juntas. Todo se arregló", señala el músico.

Futuro museo

Entre las obras de la colección de Nicanor Parra se encuentran varios óleos, como La cantante calva, El acordeonista y El pájaro y la grabadora. La mayor parte del patrimonio legado por la artista pertenece a su hija Isabel, quien preside la Fundación Violeta Parra y el futuro museo en su honor, que se está construyendo en Vicuña Mackenna.

Si todo sale bien, el espacio, que reunirá la obra visual de la autora de El albertío, se inaugurará entre septiembre y octubre de este año. A los $ 920 millones que entregó el Consejo de la Cultura para su construcción, se suma ahora el aporte del gobierno de Île-de-France, gestionado por el hijo de la artista, Angel Parra, que entregará otros $ 140 millones para el término de un auditorio, con capacidad para 150 personas.

"Con este aporte cerraremos la etapa de construcción, luego viene elegir el modelo de negocios para gestionar el funcionamiento del museo. Lo más probable es que se elija a alguien que lo administre, ya que Isabel tiene su agenda propia como artista. Se barajan nombres, pero aún no está decidido", dice la gerenta del proyecto, Fernanda Villegas. "El museo será pequeño y no tan complejo de administrar. Habrá dos salas de exhibición permanente de la obra de Violeta. El grueso es de la fundación, pero se está solicitando que otros familiares presten también sus obras", agrega Villegas.

Entre ellos está Nicanor. "Lo más seguro es que los cuadros se exhiban en el museo. Ya están en conversaciones para que se exhiban allá y mi papá se los ha prestado en otras oportunidades", cuenta Juan de Dios.

De la familia Parra, sólo Isabel y su hija Tita pertenecen a la fundación, junto a otros 11 miembros, entre ellos, el escritor Cristián Warnken, el músico y premio Nacional Miguel Letelier y la ex ministra Josefina Bilbao.