El Mercurio
Bajos costos, accesibilidad desde cualquier lugar y libertad editorial son algunas de las ventajas que plantean las señales generadas desde la red que hoy se están abriendo camino.
Javier Contreras.
"Tu mejor momento aún está por llegar", cantaba Freddie Mercury en "Radio Gaga", hit de 1982 del grupo Queen. Eran los días de la irrupción de MTV y el boom de los videos musicales, y el futuro de la radio estaba en riesgo. Mercury insistía en esa letra que habría románticos que no dejarían que eso ocurriera.
"Hay un romantismo vinculado a la radio que la mantendrá viva", concuerda Juan Manuel Margotta, dos décadas después. Sin embargo, este psicólogo de 28 años hace un alcance. "Es la radio del dial la que sí va hacia la muerte", dice. Su comentario no es antojadizo. Desde hace dos años lidera un proyecto llamado "Súbela" (www.subela.cl), uno de los emprendimientos pioneros de las radios online en Chile.
El auge de internet en la última década desdibujó las plataformas tradicionales de transmisión de contenidos y la radio no estuvo ajena al proceso. Prisionera de las limitantes técnicas del dial FM/AM, de pronto sus posibilidades florecieron gracias a la red. "Si sales de Santiago, pierdes la señal de una radio del dial. Además, nadie quiere más antenas cerca de sus casas. Pero eso cambió radicalmente con internet", explica Margotta.
No es casual que la mayoría de las radios tradicionales del país cuenten con un streaming de su señal en sus sitios de internet que saquen partido de ese potencial. Nadie desconoce la ventaja de ser escuchado desde cualquier punto del mundo a través de un computador.
Pero la verdadera oportunidad, cree el director de Súbela, va en otro sentido. No se trata de apostar por un simple repetidor digital de una señal análoga. El desafío está en sacar partido de las otras ventajas comparativas que ofrece internet.
Margotta dice que se embarcó en el proyecto por una razón fundamental: hacerse cargo de la falta de diversidad de contenidos de los medios tradicionales. "En general, las noticias son las mismas y las opiniones están muy filtradas", postula. Por esa razón, su propuesta es también discursiva, con espacios de conversación que alterna con programación musical. "Una mirada de gente joven que no estuviera en los medios", afirma.
Una mirada similar tiene Max Valdés, cerebro detrás de FM Box (www.fmbox.cl), radio online fundada en 2003 y la que lleva más tiempo al aire en Chile. "Lo que te permite internet es apuntar a nichos", complementa.
Fue en 2002 y con solo 12 años que Valdés descubrió que podía compartir desde la IP de su conexión la música que escuchaba en el reproductor de música de su computador. Ese fue el comienzo de una aventura que con los años se convirtió en un pequeño fenómeno: una radio online concebida por un adolescente con contenidos para adolescentes. "Las radios juveniles tradicionales tienen tipos de 30 años hablándoles a los adolescentes", fundamenta.
La clave, dicen ambos, está en la accesibilidad y bajos costos detrás de la infraestructura de una radio online. "Ya no quedan señales en el dial y comprar una saldría millones. Ante eso, una radio online es claramante mucho más conveniente como emprendimiento". Añade que provee de un feedback que no ofrece la radio tradicional: "Internet nos permite medir nuestro alcance sin encuestas de ningún tipo. Saber cuántas personas nos estan escuchando y desde dónde en cualquier momento".
Pero Márquez pone una cuota de cautela. Sostiene que en Chile falta por avanzar. "Falta experiencia en el manejo comercial, en convertir estos proyectos en negocios rentables a través de la publicidad y en que las marcas vean en ellos una oportunidad". Con todo, el proceso de recambio, reiteran, parece inevitable. Y que el mejor momento de la radio, según Freddie Mercury, aún por llegar quizás tenga que ver con ese futuro digital que hoy da sus primeros pasos en Chile.
También la SCD
La radio online de la organización difundirá música chilena en todos sus géneros y estilos.
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