Actuará este viernes , en el Teatro Nescafé de las Artes, para recaudar fondos para las becas de sus esforzados integrantes.
MAUREEN LENNON ZANINOVIC
Conformada por 60 niños y jóvenes de la localidad de la VIII Región, la Orquesta Bicentenario de Curanilahue -creada en 2002 tras la huella de la inolvidable y pionera agrupación del mismo nombre surgida a mediados de los 90 gracias al impulso, entre otros, de Américo Giusti- se ha convertido en todo un emblema del exitoso y creciente fenómeno orquestal juvenil en nuestro país.
Sus integrantes son alumnos de enseñanza media (entre 15 y 18 años), y como la mayoría acaba de terminar su etapa escolar, su permanencia en esta agrupación tiene los días contados:
"Por eso decimos que, de alguna manera, con este egreso de cuarto medio la orquesta se está desmantelando. Sabemos que será bien fuerte para todos estos chicos no volver a tocar más en el conjunto", cuenta su directora Alejandra Urrutia. Y agrega que, a modo de despedida y como una manera de recaudar fondos para las becas universitarias de algunos de sus integrantes, este viernes (20:00 horas), ofrecerán una presentación de gala en el Teatro Nescafé de las Artes. El programa incluirá, entre otras piezas, la Quinta Sinfonía de Beethoven y la "Danza húngara N°1" de Brahms.
"Ahora hay que trabajar por una nueva generación, y para eso ya contamos con 250 niños inscritos", comenta emocionada Urrutia. ¿A qué se debe esta cifra bien impactante? La directora explica que en esta oportunidad, y a diferencia de audiciones anteriores, trataron de incluir a la mayor cantidad de postulantes, "porque puede pasar que, en un primer momento, el niño no se ajuste muy bien a la dinámica de una orquesta, y con el pasar de los días sí se adapte. Además, estamos con proyectos bien ambiciosos: queremos que de estos chicos nazcan coros y bandas. La meta es ir por más".
La Orquesta Bicentenario de Curanilahue se financia con aportes de la municipalidad y de la Fundación Arauco. "Además, contamos con profesores para cada fila de instrumentos, en su mayoría integrantes de la Orquesta Sinfónica de la Universidad de Concepción, y cada año hay que pelear el presupuesto para la permanencia de estos docentes, que son muy importantes para el funcionamiento de la orquesta", dice Urrutia.
Y en estos cinco años como directora titular, la experiencia ha sido tremendamente enriquecedora: "Estamos apostando por la excelencia, y con excelencia se construye un país. La música transforma al ser humano; y a mí y a estos chicos nos ha dado herramientas básicas para la vida: disciplina, puntualidad, trabajar en equipo; y seguir y liderar al otro. La música, más que nada, alimenta el alma".
PROGRAMARSE:
* Viernes 4. 20:00 horas. Teatro Nescafé de las Artes. Entradas entre $10.000 y $15.000. Mas datos Aquí
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