Phaeton Piano Trio debuta este martes.
La agrupación se presentará en el Teatro Municipal de Las Condes. Tocará obras emblemáticas del rico repertorio para esta formación, de Haydn, Beethoven y Dvorak.
Romina de la Sotta Donoso
El romance más intenso entre la composición y el formato de trío con piano fue justo en el periodo romántico: 170 compositores escribieron piezas para violín, violonchelo y piano. Pero justo antes, en el clásico, nacieron algunas de las más emblemáticas: Mozart escribió siete; Haydn, 13, y Beethoven, 21.
"El repertorio para trío con piano es fabuloso, es una literatura muy rica", asevera el chelista Peter Hörr (1968). Junto con el violinista Friedemann Eichhorn (1971) y el pianista Florian Uhlig (1974) conforman el Phaeton Piano Trio, que debutará este martes en el Teatro Municipal de Las Condes, en la temporada "Fernando Rosas" de la Fundación Beethoven. Mañana ofrecerán un concierto gratuito para estudiantes, en el Teatro Centro Cultural Carabineros de Chile (FundacionBeethoven.org).
Eligieron dos obras clásicas y una romántica: los Tríos con piano en Do Mayor, Hob. XV:27, de Haydn; en Re Mayor, Op. 70, N° 1, "de los espíritus", de Beethoven, y en Mi Menor, Op. 90, "Dumky", de Dvorak. Fueron compuestas en el arco de un siglo: en 1797, 1808 y 1891, respectivamente.
La obra de Haydn, dice Hörr, "es puro júbilo y, al mismo tiempo, es entretenimiento clásico, en el nivel más alto. Entretiene porque el violín y el chelo duplican la voz principal, que viene del piano; es una suerte de música popular y su atmósfera tiene aire de folclor".
La pieza de Beethoven, conocida como Trío "de los espíritus", por su misterioso segundo movimiento. "Es, como toda su música de cámara, muy íntima, y posee una característica única de Beethoven: la atmósfera y los afectos cambian repentinamente. Esta música no es entretenimiento de alto nivel, ni música popular, sino que persigue la veracidad y la pureza", aclara.
Tres solistas
El Trío "Dumky", que completa el programa, es la obra de cámara más conocida de Dvorak, quien toma melancólicos lamentos del folclor checo ( dumka ) y los articula con alegres danzas. "Dvorak escribió las más ingeniosas creaciones utilizando melodías de la música tradicional. Es música puramente emotiva, pero eso no significa que no tenga un concepto musical fuerte", dice Hörr.
Hörr ya vino a Chile, hace tres años, pero con otro de sus conjuntos, el Mozart Piano Quartet. "Tenemos muy buenos recuerdos, la audiencia fue cálida y le interesaba la música, especialmente en el concierto que dimos para la juventud", confiesa.
Según anunció inicialmente la Fundación Beethoven, este retorno en julio sería con su propia orquesta, la Hofkapelle Weimar, pero al final vendrá con el Phaeton Piano Trio.
Hörr explora otros formatos, y lo hace sin descuidar su carrera como solista, que incluye actuaciones con la Filarmónica de Berlín. Lo mismo sucede con sus colegas del Phaeton Piano Trio, equilibran brillantes carreras como solistas con la música de cámara, y tienen más de 20 discos cada uno.
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