El Mercurio
El último cine de barrio de Valparaíso, ubicado en el cerro Bellavista y colindante con la casa de Pablo Neruda, estuvo durante varios años abandonado.
Por HERNÁN CISTERNAS A.
Considerado un inmueble siamés con la casa de Pablo Neruda -"La Sebastiana"-, el Teatro Mauri de Valparaíso vuelve a cobrar vida tras años en desuso y abandono en el cerro Bellavista.
El resurgimiento del que fuera el último cine de barrio que quedaba en el puerto -la ciudad llegó a tener 45 salas entre el plan y el cerro- es el resultado de una iniciativa impulsada por la Sociedad del Derecho de Autor (SCD), que al adquirirlo en 2015 para habilitar su primera sala de conciertos en regiones, evitó su demolición por parte de inmobiliarias que aspiraban a construir allí un edificio y un supermercado.
La vinculación del Premio Nobel con el Teatro Mauri no se limitó solo al hecho de que "La Sebastiana" y el cine eran el anverso y reverso de un conjunto arquitectónico único. Para acceder a su casa, el poeta usaba el pasillo de ingreso al teatro, sorteando los anuncios de lo que se proyectaba.
El doctor Francisco Velasco, amigo y vecino, cuenta que varias veces el poeta le recomendó la película que daban, porque a juzgar por los balazos que se escuchaban, parecía ser buena. Además, la terraza del cine -con vista privilegiada de la bahía porteña-, a la que se accedía por una escala de su casa, era utilizada por Neruda para sus reuniones y fiestas.
Recuperación por etapas
A partir de mañana, el Teatro Mauri SCD iniciará su programación musical. Lo hará en la denominada "Sala Cero", que corresponde al primer tramo rehabilitado en el hall del recinto, espacio de 300 m2 y capacidad para 90 butacas, que se recuperó junto con el sector de oficinas del segundo y tercer piso, además de la fachada y la plazoleta del lugar.
Debido al alto costo del desafío asumido, la SCD proyectó una restauración por etapas del inmueble de cinco pisos construido en 1951, que a lo largo de los años sufrió varias intervenciones, en particular cuando dejó de usarse como teatro y se empleó como bodega, centro de acopio de electrodomésticos y gimnasio de la ex Digeder, a lo que se sumaron daños por un incendio en 1991.
Será la primera sala de conciertos que la SCD dispondrá en regiones. Hoy tiene otras tres en Santiago: en Bellavista y en los malls Plaza Vespucio y Plaza Egaña.
Para esta remodelación se recurrió a planos originales y fotos antiguas, para conservar la estructura original. Como ya no se requieren las 418 butacas que tuvo en platea, las 250 en balcón y las 250 en galería, el proyecto unificó las dependencias del edificio, eliminó la antigua sala de teatro y generó un solo gran espacio.
Bajo un concepto de versatilidad, el aforo del nuevo Teatro Mauri fluctuará desde 200 a mil personas. Contará con plataformas retráctiles y paredes modulares, para modificar su capacidad según los requerimientos del espectáculo que se presente.
Se estima que la restauración culminaría en 2019 y dependerá de las gestiones que la SCD realiza para obtener los recursos que se requieren. El proyecto tiene un costo de $4.500 millones.
Las primeras en presentarse serán las cantantes oriundas del puerto Pascuala Ilabaca, Lucy Briceño y Maite Solana. Durante el mes habrá shows con Pedro Piedra, Julio Piña y Pavez y Los Inseguros, entre otros.
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