Joyas del repertorio universal, música chilena, nuevas creaciones y homenajes a Bernstein, Debussy y Rossini fueron programados.
Por Romina de la Sotta Donoso
El Centro de Extensión Artística y Cultural (CEAC) de la Universidad de Chile anunció ayer la temporada 2018 de la Orquesta Sinfónica Nacional, el Ballet Nacional Chileno, la Camerata Vocal y el Coro Sinfónico.
"Fieles a nuestra misión universitaria, ofrecemos contenidos de alta calidad artística con una política de precios que da cuenta de una vocación consistente con la accesibilidad del gran público. Y esto se ha visto reflejado en un aumento sostenido del público durante los últimos tres años", declaró Diego Matte, director del CEAC.
De hecho, aún no se acaba el año y ya han contado 119.903 asistentes, frente a los 98.041 de 2016 y los 92.463 de 2015.
Leonid Grin, director titular de la Sinfónica, destacó el alto nivel artístico que ha alcanzado la orquesta. "Eso es lo que ha hecho posible traer a solistas tan excepcionales como David Geringas o Tzimon Barto, no el dinero", aseguró.
El lituano David Geringas, por ejemplo, es discípulo de Rostropovich y, según Grin, "no tiene nada que envidiarle a Yo-Yo Ma". Él será solista en el Concierto para chelo de Dvorák, en la apertura de la temporada, en marzo. Grin igualmente destacó a Jon Nakamatsu (EE.UU.), ganador del concurso Van Cliburn, quien será solista en el Concierto para piano de Gershwin, en octubre. "Será una ocasión especial para mí, porque rendiremos homenaje a Leonard Bernstein, con quien tuvimos una relación de amistad y colaboración en sus últimos diez años de vida", apuntó. Del estadounidense tocarán la Obertura "Cándido" y selecciones de los musicales "On the Town" y "West Side Story".
Igualmente, conmemorarán los 150 años de la muerte de Rossini, con su Stabat Mater y los 125 del deceso de Tchaikovsky, con su Sinfonía "Patética".
Los compositores más programados el próximo año serán Mozart, Haydn, Beethoven y Shostakovich, y entre las batutas se destacan Francois López-Ferrer, director asociado de la orquesta; Alexander Mickelthwate, Aldo Sisillo y José Luis Domínguez.
La música chilena ganará espacio: se comisionará una obra al exitoso compositor nacional radicado en Australia Andrián Pertout. Alberto Dourthé será solista en el Concierto para violín de Juan Orrego Salas, María Paz Santibáñez, en el Concierto para piano de Enrique Soro, y el guitarrista Luis Orlandini, en "Rapsodia para días de duelo y esperanza" de Darwin Vargas. También se programó a René Silva, Nelson Vinot, Raoul Hügel y Luigi Stefano Giarda.
Juan Pablo Villarroel, director del Coro Sinfónico y la Camerata Vocal, anunció que esta última abordará "Siete Últimas Palabras de Cristo en la Cruz", de Haydn, y la "Misa Criolla", de Ariel Ramírez. "Con el Coro Sinfónico volveremos al siglo XIX, haciendo las dos obras más significativas y hermosas del clasicismo vocal, el Stabat Mater de Rossini, y 'La Creación' de Haydn", detalla.
También serán vitales en tres conciertos de extensión: primero, "Carmina Burana" en la Quinta Vergara (5 y 6 de enero), y después, el Réquiem de Verdi y la Novena de Beethoven. Este ciclo estrenará dos programas infantiles, con la "Sinfonía de los juguetes" (Leopold Mozart), y música de cine y videojuegos.
El Ciclo de Pianistas se dedicará a las 32 Sonatas de Beethoven. Los nueve pianistas participantes seguirán el orden cronológico. "Así, el público podrá apreciar la vida casi completa de este gran compositor", dice Luis Alberto Latorre, director del ciclo.
El Ballet Nacional Chileno estrenará en abril la relectura de su director, Mathieu Guilhaumon, de un emblema del repertorio clásico: "Giselle", con la música original interpretada por la Sinfónica. "Nunca en Chile se había hecho esto de darle una mirada contemporánea al repertorio del ballet clásico", apunta. Y destaca "1,2,3,4,5,6", montaje que cocreará con Eduardo Zúñiga, ex bailarín de la compañía que ha sido premiado en Europa y Asia. Habrá dos coreógrafos ingleses invitados: Caroline Finn retornará para hacer un homenaje a Debussy, a cien años de su muerte, e Ihsan Rustem debutará en Chile.
Dos casas nuevas
Diego Matte aclaró que el precio que la Universidad de Chile pagó por el ex Teatro Baquedano, que el CEAC arrendaba hace 30 años, fue de 116 mil UF. Y que lo remodelarán para que se convierta en la sede del Ballet Nacional Chileno.
La Sinfónica y los coros, en tanto, tendrán su sede en el centro cultural que se construirá en Vicuña Mackenna 20 y que compartirán con el Instituto de Asuntos Públicos y con la Escuela de Posgrado de la U. de Chile. "Ya se realizó la licitación de las obras y la adjudicación está en Contraloría. Me imagino que en enero debiéramos tener noticias de la Contraloría y en marzo podríamos hablar del inicio de las obras", dijo.
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