El Mercurio
La cantante, que repletó el recinto en su segunda gira nacional del año, proyecta pausar sus presentaciones durante el verano, donde grabaría nuevo material.
Por Raimundo Flores y José Vásquez
"¡Oye, que está lleno!", dice Mon Laferte, con ese tono cantadito y tan chileno que todavía resuena gracioso en un vocabulario en que inevitablemente ya incorporó algunos modismos mexicanos. La gente, incondicional, le devuelve un apabullante "¡ídola!", que repite y repite agitando unos globos blancos. El Movistar Arena está repleto, con un público tan heterogéneo, que cruza demasiadas generaciones: padres con hijos y abuelos, jóvenes, niños; todos caben en el éxito más rotundo de un artista chileno en el último lustro.
La cantante está sobre el escenario, y todo fluye tan matemático como emocional. Los kilómetros de ruta multiplican el oficio de una banda que funciona como un equipo compacto y que sigue a la voz de "Si tú me quisieras" hasta en las coreografías que dibuja en el tablado. Y la viñamarina, matizando su vendaval al micrófono, susurrante y desgarrador, por momentos, conjuga todos los colores de la música popular.
Promediando el concierto todo es fiesta y pasan temas como "Cielito de abril" con Manuel García y "Yo te qui", con el Rulo de Los Tetas antes del karaoke multitudinario de "Amor completo" y una "Amárrame" remixada con "Loca" de Chico Trujillo.
Anoche, en el Parque O'Higgins, Mon Laferte cerró su mejor año artístico que comenzó irrumpiendo en enero en la Cumbre del Rock Chileno en el Estadio Nacional y luego haciendo historia en el Festival de Viña del Mar. Un nuevo disco, su primer Grammy Latino, dos giras por Chile, shows en Estados Unidos, Latinoamérica y España, un recorrido tan exitoso como extenuante, que ya apunta a repetir en 2018, aunque ella quiere pausar todo, por un momento.
Parada solicitada
Para el próximo año el ritmo no parece disminuir. En enero, la cantante acompañará a Plácido Domingo en su show en el Estadio Nacional; en abril y mayo girará por Estados Unidos y Canadá con Juanes, y entre junio y julio recorrerá Europa en solitario. "Tengo ganas de seguir trabajando, haciendo cada vez mejores canciones y mejores discos", expresó ayer la artista en una conferencia previa a su concierto.
Ahí Mon Laferte también manifestó su intención de tomarse un pequeño descanso de los escenarios entre los dos primeros meses del próximo año, lo que descartaría su presencia en Viña 2018. "Han sido tres años de no parar. Me duele la espalda horrible por las giras y los viajes. Nunca pensé que iba a pedir parar, pero mi mente y mi corazón lo necesitan", señaló, aunque aclaró que durante este receso seguirá trabajando en nuevos proyectos: "Tengo ganas de escribir, tengo muchas canciones. Tengo un proyecto ambicioso que quiero hacer, que mezcla música y danza; entonces, necesito tiempo para esto".
Mon Laferte se refirió además a las elecciones presidenciales, llamando a los jóvenes a participar en estas instancias y admitiendo que el domingo fue la primera vez que votó. La cantante manifestó su interés de contribuir a la sociedad desde su oficio. "Voy a seguir luchando desde mi trinchera, que es el arte, por lo que creo, por los derechos de la mujer, por la igualdad y la educación. Con mi ejemplo voy a intentar inspirar a los jóvenes".
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