El Mercurio
De manera voluntaria y anónima.
De acuerdo a la estrategia diseñada por el abogado de la familia , este lunes se interpondrán las querellas contra quienes aún mantienen en su poder documentos del antipoeta.
Por María Teresa Cárdenas M.
Catorce cuadernos, una bandeja y un archivador con cientos de páginas que corresponden a los borradores de sus discursos de sobremesa, entre otros materiales, fueron restituidos este miércoles al patrimonio de Nicanor Parra. Esto, después de que varios coleccionistas se contactaran con una reconocida figura del mundo del arte para devolver a través de ella los inéditos del antipoeta que tenían en su poder.
Lograr el éxito de esta gestión fue el motivo por el cual las querellas anunciadas para después de Navidad se postergaron hasta el próximo lunes, explica el abogado Luis Valentín Ferrada. "Mientras no cerráramos esta importante devolución, era muy inconveniente presentar la querella. Habría sido un error", afirma.
De acuerdo a la estrategia elaborada por el abogado, los nombres de quienes devolvieran voluntariamente quedarían en el anonimato. Así, se ha recuperado un gran porcentaje de los materiales inéditos sustraídos de las casas de Parra.
-¿Quedan más conversaciones pendientes?
"La situación al día de hoy se está reduciendo prácticamente a una persona. Hay más, pero son muy dispersas, y se trata de cosas más pequeñas. Respecto de esa persona, he tenido conversaciones con su abogado, y esperaré que haya una reacción antes del lunes, pero si no se produce, yo lo lamento de corazón, pero no tengo otra alternativa que presentar la querella".
Se refiere al coleccionista César Soto, quien ha sido "reticente" a colaborar. Él ha dicho que tiene los certificados correspondientes. "Esto obedece a una confusión más o menos provocada -dice Ferrada-. Lo primero que sabemos es que las tales certificaciones no existen; tal vez lo que pueda existir sean comprobantes de cheques que haya girado en algún momento".
Y agrega: "De acuerdo al Código Penal, el delito de receptación se comete por toda persona que sabiendo o debiendo saber la procedencia de los elementos que se han vendido, adquiere a cualquier título documentos que se han extraviado o que han sido sacados sin la voluntad de su dueño. Y esa amistad con Nicanor que él invoca es precisamente la constitución de uno de los elementos de la comisión del delito del que estamos hablando; es lo que acredita aquello de que 'sabía o debía saber'".
Sobre este punto, Cristóbal Ugarte, Tololo, señala: "Cómo puede decir que es amigo de mi abuelo si no le devuelve lo que él está pidiendo. Y además no tiene nada que ver que hayan sido amigos en una época con que él haya adquirido esto de una manera irregular". Y va más allá: "Él vino a La Reina en los años 70 y 80, y cuando mi abuelo se dio cuenta de que estaban desapareciendo cosas, lo dejó de recibir".
Cristóbal Ugarte advierte que Soto "ha dado varias entrevistas en las que se pisa la cola". Y cita: "Dijo que tenía la colección más grande de inéditos de Parra, pero después de la noticia de que Parra los pide, él dice que solo tiene unos papeles. El 80 por ciento de lo que ha escrito mi abuelo está en cuadernos; entonces, ¿cómo puede tener la colección más importante si no tiene cuadernos? También dijo que la había adquirido a través de Juan de Dios, que desde niño iba juntando documentos de Nicanor que eran de su propiedad. ¿Cómo puede decir que un menor es propietario de documentos privados de su padre?".
Luis Valentín Ferrada confirma que la querella será interpuesta contra todos los que mantengan en su poder inéditos de Parra. Pero señala: "Sin perjuicio de que no dudo ni un minuto en hacer lo que haya que hacer, he ido lento, he sido cauteloso, y esto, con el acuerdo de Nicanor, de Tololo, de la Colombina. Estamos conscientes de que judicializar este problema tiene efectos secundarios muy sensibles".
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