El Mercurio
Una carta de dos carillas dirigida a Javier Díaz, director (s) del Servicio Nacional del Patrimonio Cultural, enviaron ayer 21 funcionarios del Museo de Bellas Artes, que pertenecen a diferentes áreas de la institución. En la misiva se señala que existe una campaña de desprestigio contra Roberto Farriol y que un grupo, liderado por la curadora Gloria Cortés y el encargado de finanzas Rodrigo Fuenzalida, ha instalado una lógica belicista en el museo. En la carta se detalla que "se trata de un relato de supuestas víctimas de maltrato laboral por parte de un director tirano que ha coartado su desarrollo profesional...". Agregan que "ante nuestros ojos funciona un verdadero 'museo paralelo' que toma decisiones a espaldas de la autoridad, a quien están denostando en la persecución de fines personalistas más que cultivar la excelencia en sus propia áreas...". La misiva también habla de "cansancio" por tener que defenderse del grupo que señalan, que han sufrido el desprestigio público en su campo laboral y temen perder sus puestos de trabajo.
Los firmantes de la carta expresan que cuando han debido discutir diferencias con el director, "siempre hemos tenido la posibilidad de tratarlos con él, en un clima de respeto".
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