Hay 50 cupos y todos son gratuitos
M. C.
Educación
El Mercurio
A través de entrenamientos auditivos, clases de armonía y lectura de partituras, la iniciativa pretende mostrar de forma concreta qué significa estudiar esta carrera.
Uno de cada tres alumnos que ingresan a estudiar Música terminan desertando de la carrera en primer año. En la decisión suelen influir varios factores, explica el compositor Sebastián Colarte. "Está la falta de conocimiento de qué trata la carrera. Luego, si no están preparados y no saben estudiar, vienen las malas calificaciones, lo que lleva a que el alumno piense que no sirve".
Con la idea de preparar mejor a sus futuros colegas, Colarte y otros dos músicos -Ariel Jara y Cristian Banda- hoy son los profesores detrás del Preu de las Artes, un innovador preuniversitario musical que comenzará a funcionar en abril y que se financia a través de fondos del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio. Está enfocado en estudiantes de 4° medio y tiene hasta 50 cupos, todos gratuitos.
"Una de las cosas más importantes es aprender a estudiar. En Música las pruebas miden el dominio de ciertas habilidades. Y las habilidades no se desarrollan de un día para otro, sino con la práctica constante. El alumno que crea que estudiando y pasando de largo la noche anterior le irá bien, está totalmente equivocado", explica Colarte.
El preuniversitario incluirá clases teóricas y prácticas, las que se dividen en tres grandes áreas: entrenamiento auditivo, lectoescritura, además de armonía y análisis. "Los alumnos aprenderán a entrenar su oído, leer partituras y comprender qué sucede en términos armónicos y melódicos. Nuestro programa tiene una duración de ocho meses y es prácticamente un primer año de universidad. Esto contribuirá a una mayor adaptación al primer año de cualquier carrera musical, además de ayudarles a preparar, en algunos casos, las pruebas especiales de ciertas casas de estudio".
Compositores, lutieres y directores
Las clases del Preu de las Artes se realizarán por las tardes en una casona ubicada en el centro de Santiago, cerca del metro República.
Para postular por un cupo, los interesados tienen hasta el 5 de abril para ingresar a www.preudelasartes.cl, donde se encuentra la ficha de inscripción. Al llenarla, se pide definir cuáles son las áreas de interés, con opciones que incluyen especializarse en un instrumento musical, ser compositor, dedicarse a la producción, al canto, a la lutería o a la dirección orquestal, entre otros.
Además, como requisito se pide tener el apoyo de un tutor.
"Incluimos a la familia porque nos parece relevante que estén apoyando a sus hijos en esta difícil decisión. Los padres tienen una charla conmigo junto con el psicólogo con el que trabajamos y ahí en general les explicamos de qué trata el programa, cuál será nuestra metodología de trabajo y, por sobre todo, rompemos hartos prejuicios con respecto a estudiar música", dice Colarte.
"Las típicas preguntas son si se puede vivir de la música, si es verdad que pasan hambre. Sabemos que los papás se preocupan y está toda esta mitología detrás del rubro, pero nosotros intentamos explicarles el perfil del músico profesional, el que de verdad vive de la música y su vocación, que es el tipo de profesional que queremos formar", agrega.
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